El pasado viernes 24 de enero, el Secretario de Turismo Rodolfo Elizondo mencionó en su participación en el foro “Cultura y Turismo: una Relación Estratégica”, que organizaron la Secretaría de Turismo y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en la Ciudad de México, la importancia de impulsar el turismo cultural y diversificar la oferta turística de nuestro país, la cual suele concentrarse en la promoción de las playas y sitios arqueológicos.
En ese mismo foro, la Secretaria de Educación Josefina Vásquez Mota hace énfasis en la necesidad de consolidar los mercados de turismo cultural sin dejar a un lado el respeto al ambiente de las regiones.
Si efectivamente, la Secretaría de Turismo Federal y la Secretaría de Educación se unen y ejercen un presupuesto apropiado, seguramente nuestro estado de Coahuila deberá verse muy beneficiado. Pues precisamente, en esta misma semana la Secretaría de Turismo de Coahuila presentó la campaña de difusión que utilizarán para posicionar a Coahuila.
La campaña de Coahuila se lleva a cabo con la asesoría del Museo del Desierto, quien generó la idea de colocar figuras gigantes de dinosaurios en sitios estratégicos. Lo anterior siguiendo la idea de Osborne en España, cuyos toros gigantes son un ícono de la publicidad española.
Es así como pronto veremos al menos 3 figuras de más de 900 kilos en algunas de las carreteras coahuilenses. Pues es nuestro estado precisamente cuna de muchas especies de dinosaurios, y el Museo del Desierto atrae a miles de visitantes de México y del extranjero que buscan conocer la riqueza de esta zona.
Sería interesante también promover no sólo la zona desértica del Estado. Pues si viajamos un poco hacia la Sierra de Arteaga descubriremos magníficos paisajes, algunos proveedores de hospedaje y alimentación y un creciente número de personas que a orillas de la carretera ofrece al visitante deliciosas alternativas comestibles elaboradas con manzana: una fruta que en esta región es dulce y jugosa como ninguna.
Así, quienes pasean por la carretera de la Sierra pueden adquirir mermeladas, jaleas, licores, dulces y pasteles. Muchos de manzana, otros elaborados con chabacanos, perones, peras y duraznos.
Quizás ya sólo nos falta el grupo de inversionistas que impulse nuestra región y genere los empleos que muchos están esperando.Y tal vez no sea tan complicado, basta ver cómo en Canadá se le cobra al turista una cantidad de alrededor de 200 dólares (e incluso más) por llevarlo a recorrer la zona de huertas tanto en Columbia Británica, como en Ontario.
El recorrido que se realiza en autobus incluye conocer distintas huertas, caminar por alguna de ellas, tomar una canasta, cortar las frutas y posteriormente, entrar a un rústico café a consumir algún platillo elaborado por los mismos dueños de la huerta y a comprar souvenirs obviamente, con figuras de manzana. Después, los visitantes pueden regresar a casa con la satisfacción (y la fotografía) de haber conocido dónde se produce la fruta de manera natural, y quizás todavía con algunas manzanas en la bolsa.
Al finalizar el verano, los dueños de las huertas manzaneras de Canadá realizan el "Apple Fest", que no es más que una fiesta de la cosecha, a la que acuden los estresados citadinos buscando un poco de aire fresco y unos cuantos kilos de fruta frescas para llevar a casa.
Con todas las tendencias ambientalistas y de consumo responsable, quizás ahorita sea el momento de crear nuestro propio corredor turístico y hacer que efectivamente la Feria de la Manzana que se realiza en septiembre en San Antonio de las Alazanas, sea un evento no sólo para los visitantes locales, sino que atraiga a personas de otras partes de México y que dejen un poquito de ingresos a los coahuilenses......................
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